PIZZA torta de provolone//Serie masa blanca//Escuela de panadería//Capítulo 3

A medio camino entre varios mundos la receta de hoy con la masa de pan blanco que te he enseñado a hacer unas semanas atrás es absolutamente espectacular.

Pizza-torta de queso provolone

Vamos a hacer juntos un par de versiones de esta fabulosa pizza-torta que te va a encantar a ti y a los tuyos.

La primera versión es un clásico de tomate, champiñones, queso provolone y bacon con abundante orégano y un toque de rúcula fresca al salir.

La segunda versión vamos a dar sabores ácidos, especiados y potentes como puedan ser los de los tomates secos y las aceitunas verdes con un toque de cebollino al salir bien fresco y abundante.

Ambas versiones, por supuesto, con una loncha bien hermosa de queso provolone italiano. Un queso cremoso, fundente y aromático perfecto para la plancha y para nuestra receta de hoy.

Tiene rasgos de pizza napolitana de bordes gruesos y masa fina pero también tiene toques profundos de nuestro pan casero de masa blanca que, apenas hemos amasado empleando la técnica de la autolisis y que hemos mejorado en aroma y sabor con un prefermento poolish. También tiene un toque de empanada, pero abierto y de ahí su nombre.

Pizza torta de queso provolone

Adéntrate y disfruta en las entrañas de esta receta porque la vas a tener que hacer una y otra vez cuando la prepares en tu casa para los tuyos.

Ingredientes para 2 pizza-tortas:

unos 800g de masa de pan básica blanca
Salsa de tomate casera
2 lonchas de queso provolone
Bacon ahumado
champiñones frescos
Aceitunas verdes sin hueso en rodajas
Tomates secos
Rúcula
Cebollino
Sémola de trigo para manipular la masa e introducirla al horno
AOVE
Sal
Pimienta negra

Elaboración:

Una vez que tengamos hecha nuestra masa de pan blanco, que deberías saber hacer ya más que de sobra pero que si no la conoces la podrás ver aquí. Una vez hecha y reposada a menos 12 horas en frío dándole un par de pliegues a la masa para mover bien las burbujas de aire entonces comenzaremos con nuestras torta pizzas.
Precalentaremos el horno a 250ºC y pondremos la piedra refractaria sobre la rejilla del horno bien cerca de la parte inferior de este.
Dividiremos la masa en 2 porciones de unos 400g /una y formaremos unas bolas tal y como se muestra en el video de más abajo. Dejaremos reposar estas bolas una vez formadas al menos unos 10-15 minutos para que nos sea más fácil el proceso que viene a continuación.
Pasado dicho reposo presionaremos con las manos y la masa bien espolvoreada con sémola desde el centro hacia afuera de modo que vayamos abriendo un hueco en la masa (no un agujero, queremos estirarla como una pizza, pero dejando los bordes bien gruesos y sin aplastar para no perder las burbujas de aire que hemos creado con nuestros pliegues.
Una vez estirada la masa y con sus bordes en su sitio (puedes ver esto claramente en el video de debajo) entonces añadiremos los ingredientes. Yo he puesto en ambas lo primero la salsa de tomate, el queso provolone, y el resto de los ingredientes, pero los podéis alterar a vuestro gusto menos, eso sí que no hay que tocarlo de posición, el queso provolone, es la clave y la piedra angular de nuestra receta.
Una vez terminado con los ingredientes nos iremos al horno con ayuda de la pala de pizzas que usamos también para los panes espolvoreada bien de sémola de trigo para que resbale y no se pegue (es útil, pero deja residuo en la piedra que habrá que desechar antes de las siguientes hornadas de días posteriores)
Hornearemos a 250ºC sobre la piedra unos 20-25 minutos.
Sacaremos y directamente a disfrutar y a gozar de estar maravillas, siempre es interesante añadir ingredientes frescos como la rúcula o el cebollino que he puesto yo hoy, pero puedes añadir jamón serrano al final, jamón de york, tomates Cherrys crudos cortados al medio, hojas de espinacas baby frescas, etc.… las combinaciones son infinitas. Cómo es una masa bien hecha podemos dejarlo enfriar también y darle un golpe de horno cuando queramos comer y admite congelación, igual, nada más perder calor al congelador y cuando la queramos directamente congelada al horno a 200ºC uno 12 minutos.